EL INFIERNO ESTÁ AQUÍ

Hace unos pocos años que en la tertulia literaria que se celebraba en el Club Naútico del pueblo marítimo en el que resido vino a presentar su libro autobiográfico una joven oriunda de Afganistán, la cual al percatarse del modelo de vida en el que nos movemos en mi país quedó absolutamente maravillada , y no se lo podía creer.

Desde la visita de aquella joven ha transcurrido el tiempo, pero como todo el mundo sabe en la actualidad en aquel  rincón del mundo de Oriente Medio la situación ha caído en el infierno. En efecto,tras el fracaso de Occidente al haber luchado contra los talibanes que son unos grupos radicales del islamismo que siempe han apoyado a otras fracciones terroristas, y haber dejado abandonada a la población a su suerte, este grupo radical ha instaurado en aquel lugar un régimen tan demencial y asesino. como terrorífico en el que se eliminan los Derechos Humanos en aras de la rigidez de la Ley Islámica que anula y aplasta a la libertad de las personas, sobre todo del sexo femenino.

En todos los medios de comunicación tanto de Europa como de América no cesa de denunciarse con toda la lógica del mundo el vejatorio e indignante trato que reciben las mujeres por parte de los demonios talibanes en aquel país, a tenor de la doctrina feminista que impera en Occidente ya que la naturaleza humana instintivamente; por ley natural, tiende a romper cadenas y a vivir con plenitud. Sin embargo hay que precisar que esta subvaloración de las damas en aquel lugar, no deja de ser una actitud extrema de unos fanáticos que viven agarrados a una intolerante rama de la religión de Mahoma la cual de un modo más o menos moderado forma parte de la misma tradición islámica que hay allí y en otros paises del Oriente Medio. Aunque haya buenas personas y algunas que no se sientan muy religiosas, dicha cultura que forma parte del poder político con todos los matices que se quiera constituye el marco vital en el que se desenvuelve aquella sociedad. Se es islamista, como se es hinduista, o helénico-judeo cristiano como es en nuestro caso con unas culturas específicas, y no todo el mundo es uniformemenete igual como pretenden hacernos creer los partidos políticos de izquierdas.

En los viajes que he hecho a Turquía y a Egipto, en ambos paises me han contado que la mujer debe de ir medio cubierta, porque según Mahoma ella es como un fruto que tienta al hombre y por eso no debe de mostrar su rostro. Mas por otra parte es estúpido decir como discursean los sujetos postmodernistas,  que aquí en Europa también las mujeres iban a la iglesia con un velo en la cabeza puesto que esta costumbe forma parte de un pasado muy lejano, sobre todo en el medio rural  del que ya nadie se acuerda.

Conozco el relato de una mujer periodista de Suecia que por razones de trabajo se fue a vivir unos días en el seno de una agradable y acogedora familia afgana la cual a pesar de que los miembros de la misma sabían utilizar la tecnología punta de un modo práctico, como asimismo la Medicina es igual que en cualquier parte del mundo, ésta emocionalmente seguía influida por la ancestral tradición islámica patriarcal por lo que las mujeres ocupaban un papel muy secundario en la institución.

Esta toma del poder de los talibanes en Afganistán es de hecho una pésima noticia, ya que este país se convertirá en un nido de terroristas, que a propósito de la doctrina islámica que hace que este lugar viva casi en la Edad Media, dado que los fanáticos todavía sueñan con hacer la Guerra Santa al infiel Occidente, e instaurar el Califato en medio mundo, esto popiciará que exista el peligro de que hayan grupos terroristas islámicos hagan fatales atentados sea en América y en cualquier país de Europa como ya ha venido sucediendo.

Para que en estos países islámicos haya un cambio en favor de los Derechos Humanos; que haya una evolución en las costumbres, es necesario que se produzca un Renacimiento cultural, seguido de una Ilustración de naturaleza laica en la que el Estado deje de ser confesional y triunfe la razón, de la que se deriva la sensatez  Pero me temo que para que esto sea real, todavían faltan algunos lustros. Mientra tanto el infierno está aquí, como decía el filófoso Jean-Paul Sartre.