Paseaban por la feria del libro Jorge acompañado de su amigo Jaime, cuando en uno de los estantes de una editorial muy famosa se pusieron a ver leer algunas contraportadas de los libros que tenían apilados, casi todos eran de escritores conocidos, de gran renombre. Estaban muy concentrados, cuando a Jorge se le acerca una edecán para recomendarle algunos títulos, el seguía leyendo y no le puso atención, ella al sentirse ignorada, se pasó con Jaime que está a un lado, Jaime detuvo su lectura y volteó a verla, quedó enamorado al instante de los ojos verdes y hermosos como nunca los había visto, estaba como envenenado con su belleza, Jaime la oía pero no ponía atención sus palabras, solo decía si con la cabeza y después de un momento de sentirse aturdido reaccionó y empezó a atender lo que ella le recomendaba. Jorge seguía concentrado en su lectura. Jaime se acercó un poco más a ella y al ver que no había ninguna persona, le entregó a ella el primer libro que encontró y le dijo que lo quería comprar. Después de pagar, ella le obsequio un par de plumas como regalo, Jaime destapó una de ellas y le preguntó que si le podía dar su número de celular, ella le dijo que con gusto. Jorge estaba algo sorprendido de que Jaime hubiera comprado ese libro, nunca le gustó a él cocinar.
Salieron del stand de la editorial y Jorge muy extrañado de la actitud de Jaime y más de su compra de un libro de cocina, le preguntó a Jaime ¿compraste el primer libro que se ocurrió solo por la edecán? Le contestó Jaime con la mirada en el horizonte, la verdad sí, me enamoré de sus ojos verdes, sentí como un veneno que me hacía reacción en todo mi cuerpo al verla, es la mujer perfecta para mí. Jorge le dice: te la bañas, sí que te envenenaste con ella, hubieras comprado mejor el libro del que yo estaba leyendo la contraportada, estaba muy interesante. Jaime le dice a Jorge: si quieres nos regresamos para que lo compres y así vuelvo a verla, es hermosísima. Jorge le dice pareces adolecente enamorado.
Se fueron al departamento que compartían ellos, en el trayecto Jaime estaba añadiendo el número de celular de la edecán que llevaba por nombre Edna, pensando ojalá no lo haya apuntado mal cuando me lo dictó, sería un terrible error porque la feria del libro se acababa el día hoy y ya mañana no podría volver a buscarla. Dejó pasar unas horas y le mandó un mensaje a Edna, él estaba impaciente, pensó que bueno que hay estos medios de comunicación, porque solo de imaginarme a los abuelos cuando mandaban cartas, todo el tiempo que tenían que esperar para recibir contestación. Pasó unos minutos y ella lo aceptó con un simple hola, Jaime estaba muy contento, agrandó su foto de perfil para admirarla y solo le comentó que estaba checando su número, que sería mejor contactarla después, cuando estuviera más descansada, se despidió.
El fin de semana siguiente, Jaime se comunicó con Edna para invitarla a cenar a una pizzería de nombre Fidanza que conocía, era el lugar perfecto para platicar con ella, ese restaurant tenía fama de ser un lugar donde muchas parejas se habían hecho novios. Jaime llego puntual a recoger a Edna a su casa, ella se veía muy bonita, vestida con un vestido blanco con unos encajes verdes bordados muy elegantes, que hacia resaltar sus ojos. Se fueron al restaurant aunque era temprano para cenar, cuando llegaron les extraño que dos personas estaban discutiendo en la cocina del restaurant, no le dieron importancia, se fueron a un rincón y empezaron a platicar cada vez más juntos, hubo un momento en que ella pasó una de sus piernas encima de las piernas de él y siguieron la plática por largo tiempo, se acercaron sus caras y por fin se besaron tímidamente, el mesero cauteloso se acercó para pedirles la orden y Jaime se vio muy autoritario pidió una pizza grande con anchoas acompañada de 2 cervezas, no le pidió opinión pero como que quería no distraerse del bello momento que estaban pasando. La pizza se tardó en llegar, solo llevaron las cervezas, no les importaba, ellos estaban muy románticos sentados muy juntos, Jaime pensaba no me equivoqué en venir a este lugar en donde dicen que muchos noviazgos prosperan. Después de un rato, ellos se distrajeron nuevamente con otra discusión que venía de la cocina, se oía que se caían ollas. El mesero llegó con la pizza y les pidió disculpas por la tardanza y las discusiones que se habían suscitado. Ellos cenaron tranquilamente y se fueron del lugar a la media noche.
En el trayecto a dejar Edna, Jaime empezó a tener escalofríos y ella estaba más tranquila que cuando hacían salieron, Jaime pensaba quizás estaba algo mal en el queso de pizza por eso sentía medio mal. Se despidió rápido de Edna prometiéndole que siempre la buscaría, que había sido una noche increíble. Ella lo besó y entro a su casa. Jaime se estaba empezando a sentir peor, como que estaba envenenado, pensó quizás la discusión en el restaurant de los cocineros habían contaminado la comida por venganza. Llegó apenas a su departamento, Jorge le pregunto ¿cómo te fue, enamorado? pero Jaime no alcanzó a contestar, entro al baño enseguida, se sentía débil con un dolor muy fuerte en la boca del estómago. Salió del baño pálido y con ojeras en los ojos, Jorge asustado le dijo ¿pues qué comiste? pareces un papel de lo pálido que estas, nos comimos una pizza en el restaurant famoso de los noviazgos, se me hace que estaba mal el queso. Voy a recostarme. Jaime tomo su celular y le mando un mensaje a Edna para saber cómo se sentía, no contestaba, un rato después le contestaron que era la mamá de Edna que tuvieron que hospitalizarla porque estaba como envenenada, ¿Qué habían comido y dónde? Jaime no lo podía creer pero era lo mismo que él estaba sintiendo, se paró y le dijo a Jorge que lo llevara al hospital porque se sentía muy mal. Jorge lo llevó casualmente al mismo hospital en que habían internado a Edna y ellos se vieron en urgencia se tomaron de la mano y pero ambos estaban muy débiles, murieron un instante después, mirándose.
Los doctores del hospital decían que su muerte se debía a una intoxicación por haber ingerido alimentos en mal estado o envenenados, porque mostraba todos los síntomas. Tiempo después se supo que el cocinero del restaurant se había molestado con el dueño y contaminado las anchoas con veneno, lo que provocó la muerte de 10 personas esa noche, fue una locura todo lo que provocó, por romántico que pudiera parecer al principio
Comentarios
COMENTAR
¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales