Ojos desérticos

Tu mirada es como los primeros rayos del sol por la mañana, una prueba viviente de que después de la oscuridad llega la luz. La claridad de tus ojos me recuerda al cielo abierto, cuando ni una sola nube se atreve a interrumpir el infinito azul. Sólo con el cielo así, gozamos de la calidez del sol, y tus ojos queman como tal. Es como estar en pleno desierto a mediodía, donde la arena de las dunas amenaza con consumirte y debes huir… pero dentro de ese desierto, no importa a donde corra, terminaré por perderme en su infinidad.