Hay vida después de la muerte III

Esto es imposible, por simple hecho de que otra vida tiene que empezar con un nacimiento, y yo no he visto y no veré nunca que nace un adulto (la mayoría de la gente que muere tiene una edad adulta). En cuanto el alma, esto es otra historia. El alma no se ve, no se huele, no se escucha, no tiene materia, no tiene peso, no se puede medir. No obstante, existe, lo percibimos. Esta palabra existe en todos los idiomas. Más aún: para decir “una entrega total”, se utiliza la exposición: “en cuerpo y alma”. Es posible que en más evolucionados, en un futuro (lejano o no), vamos a estar capaces de encontrar una forma de medir lo.

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