Conciencia malherida

Las cosas más importantes yacen en la errónea interpretación absurda de no tener idea de qué hacer. A veces, como personas, debemos encontrar el camino adecuado para concientizar acerca de la realidad que afrontamos día a día. Los estándares de belleza ex profeso manifiestan formas de vidas aparentemente “perfectas”. Nosotros, como personas normales, debemos arriesgar nuestras formas de vestir, hablar y pensar en base a las normas que se han creado. La conciencia que me lleva hasta aquí me profetiza una sociedad lóbrega, llena de pretenciosos alabando los pies de Dios, mientras los demás, mueren de hambre.