Porque tu sonrisa es cálida y conforta.
Porque tu mirada es inteligente y profunda.
Porque defiendes aquello en lo que crees, a pesar de lo que te cueste.
Porque te comprometes sin medias tintas.
Porque no te es indiferente el sufrimiento de otros.
Porque luchas por lo realmente importante.
Porque eres generosa en los afectos.
Porque tienes inquietudes y estás abierta a que la vida te sorprenda.
Porque a tu lado siempre es hogar y confianza.
Porque las horas pasan contigo, hablando de todo, en serio o en broma e incluso en silencio y todo es de agrado.
Porque siempre se puede contar contigo.
Porque, por más que la noche sea oscura tu siempre encuentras un camino.
Porque en la tormenta eres sosiego.
Porque, aunque no pensemos igual tu siempre serás mi referente.
No hay un solo porque sino cientos y por todos y cada uno de ellos.
Te quiero.
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