OFERTA DE TRABAJO (Quarters 1-7) Final

OFERTA DE TRABAJO (1-7)

- Anaïs dijo;  Jefe ¿habéis mirado el ordenador? Y  Venecia, ¿enseñasteis la foto, preguntasteis en los lacares, aeropuerto, por si alguien fue a recibirla?

 – jefe  de Anaïs contesta; Si todas las direcciones son  redes clandestinas, todas pasan por el correo de Juan, pero el anuncio de trabajo sale de una dirección oscura. Anaïs ¿te acuerdas de aquel caso que tuvimos de un niño desaparecido y encontrado por el concepto de Deep Web? Pues creemos que tú hermana también cayó en estas redes de millonarios mafiosos, enfermos y viciosos, que utilizan a las personas para su satisfacción personal, sobre todo sexual. Si esto es así prepárate para no encontrar al verdadero asesino. Quien la recibió en el aeropuerto fue la novia de Juan. La reconocieron a las dos en un local del puerto, dicen que al salir del local,  tu hermana se tambaleaba, pero solo bebió, un agua con gas. Algo tuvieron que echarle dentro.

-Anaïs dijo, jefe vamos a subir al yate y te llamare más tarde.

Mientras tanto el Director General Akil había puesto hombres siguiéndola, sabía los comentarios, los rumores que se hablaba por todo el mundo de Castro, sentía miedo, si se acercaba a la verdad como la enfrentaría. Era mujer sí, pero el poder que tenia, Akil era cociente de ello, sobre todo del riesgo que eso suponía. De pronto recibe una llamada donde lo pone al tanto de todos los movimientos de Anaïs. Sin pensarlo colgó el telf., coge el móvil y hace una llamada; hola está dando con todo, ahora está subiendo al yate. Ha estado preguntando en Venecia, ¿qué hacemos si esto va a más? –alguien le contesta; no te preocupes ya tenemos a un chivo  Expiatorio, que recibirá su familia una gran cantidad de dinero, tranquilo. Dicho esto colgó.

Mientras tanto Anaïs y Pepe subieron al yate, se dieron cuenta que era igualito al de las imágenes que tenía el pendrais. Anaïs sin pensarlo enseño la foto de Juan que su jefe le había mandado por el móvil. El señor enseguida lo reconoció, Le comunico que se lo alquilo por una gran suma de dinero, para una semana. Anaïs le pregunto si noto algo raro y el señor le dijo que la cantidad de dinero que ofreció no se correspondía al estilo del caballero, pues daba la sensación de que era solo un intermediario. Anaïs y Pepe dieron las gracias por permitirlo verlo y se marcharon. Al bajar del yate Anaïs recibió una llamada de sus colegas de Washington dándole noticias de  la autopsia de su hermana… Su hermana tenía tanta droga que seguro murió de sobre dosis.  No pudieron encontrar más, por el tiempo pasado en el agua, pero daba la sensación que había  sido  brutalmente  agredida, pues tenía varios huesos rotos y le faltaban también algunos órganos. Los demás restos eran de dos chicas jóvenes, dadas por desaparecidas hacia unos meses, las dos eran  de nacionalidad españolas. Sus nombres Carmen y Josefa.

Al colgar el telf. Ya no pudo mas Anaïs aguantarse,  se fue directa a la comisaria y buscar a Akil, este al verla se adelanto y le dijo; hemos cogido al asesino de tu hermana es un tal Juan, está en el hospital.

-Anaïs contesto sin dejarlo hablar; ¿Cómo ha llegado hasta ahí?

–Akil dijo;  estábamos siguiendo la pista desde Venecia, estaba puesto en los más buscados aquí. Pues nos habían llegado noticias de que estaba en Qatar. Parece ser, que se ha mordido la lengua y le falta un trozo están curándolo. No puede hablar, pero su acompañante está siendo interrogado y ha confesado.

-Anaïs dijo; ¿quiero escuchar la interrogación?, después iré haber a Juan.

 Anaïs escucho el final del interrogatorio, no se lo creyó, porque encontraba muchas lagunas. Como el dinero para alquilar el yate ¿de dónde lo saco?, su novia ¿Por qué la utilizo? Los órganos de su hermana, las drogas, etc. Pero no dijo nada, salió y se fue directa al hospital. Cuando llego, miro a los ojos de Juan y vio, miedo, terror, miraba al enfermero. Nunca antes noto tanto miedo en unos ojos como lo que trasmitía Juan. Como no podía hablar, el médico le dijo a Anaïs que volviera al día siguiente. No le quedo más remedio que irse. Estando saliendo del hospital llamaron a Akil diciéndole que Juan había cogido un bisturí, nada más salir ellos y se había cortado el cuello, estando agonizando. Anaïs salió corriendo hacia Juan, pero llego tarde, estaba muerto. Enseguida noto que todo estaba preparado. Corrió a la comisaria y fue a la cerda del otro individuo, pero también acababa de ahorcarse con los pantalones. No pudo hacer nada, se dio cuenta que todo estaba acabado. Que el caso ya lo habían cerrado, no tuvo más remedio que preparar la maleta, volver a España y seguir investigando por su cuenta. Sabía que  en esas redes sociales nunca encontrarían nada, sabía que su hermana no será la última víctima, sabía que mientras no se controlara esas redes  ocultas de la informática, la delincuencia no tendría fin.

                                              FIN