EL SIGNIFICADO REAL DE MUCHAS PALABRAS

Hace un tiempo que una vecina que vivía enfrente de mi casa quiso desprenderse de algunos libros, debido a que iba a hacer unas obras en su hogar, por lo que tuvo la gentileza de regalarme un montón de obras de autores famosos; de entre las cuales sobresalía un Diccionario de la Lengua Española que especificaba el significado de muchas palabras en relación con el verdadero concepto de las mismas

Según señalaba aquel diccionario no hay que confundir la "franqueza " con la "llaneza" como hace mucha gente; de igual modo como tampoco es de recibo igualar la  "chafardería" con la "curiosidad"; ya que en ambos casos es como confundir la gimnasia con la magnesia.

Y esto supone que muchas veces sin darnos cuenta solemos darle a una palabra un concepto que no le corresponde

.Pues en el primer caso,se considera que la "franqueza" quien la practica muestra una actitud honesta, directa y sin dobleces ni eufemismos de ninguna clase; y que a su vez una verdad la expresa con buenos modales. Mientras que la "llaneza" es hija de una actitud vulgar y grosera que valiéndose de la verdad no respeta en absoluto la sensibilidad ni la manera de ser de la otra persona; en la que va implícita el comentario impertinente y la crítica destructiva.

De igual modo hay también una diferencia abismal entre la "curiosidad" y la "chafardería". Pues la "curiosidad" emana de una postura abierta de miras que está dispuesta a enriquecerse espiritualmente y por tanto contempla a la cultura y está relacionada con el saber. Mientras que por el contrario la "chafardería" que a mi juicio es la degradación de la curiosidad; es la hermana oscura de ésta, está asociada con una actitud superficial y banal, propia de un sujeto entrometido y chismoso de las vidas ajenas como puede ser la prensa amarilla del Corazón;  que es asimismo la epidemia moral de nuestro tiempo y que por supuesto a causa de su naturaleza de fuegos artificiales que con su respandor deslumbra a los más simples, no va a ninguna parte; en todo caso degenera en riñas y enfrentamientos entre vecinos..

En otro orden desde mi punto de vista tampoco hay que confundir el "orgullo" con la soberbia. Decimos: "Fulanito es un orgulloso", cuando quizás lo más apropiado sería decir que Fulanito es un vanidoso, un desdeñoso. Yo pienso que el orgullo bien entendido está animado por el amor propio y la digndad personal. "Me siento orgulloso-sa de mi país; de mi obra de Arte; de mi comportamiento con los demás" Y no por este orgullo miramos a nadie por encima del hombro.

El reverso de la medalla del orgullo es la falsa humildad que roza el sentimiento pusilánime y de sumisión hacia alguien superior a uno, la cual tiene una connotación religiosa. "¡Humíllate ante el Altísimo!" "El hombre no es nada; y Dios es el todo" "¡Inclínate ante tu rey!"

Como tampoco debemos de confundir a una doctrina, una ideología política con el hecho de pensar. ya que son dos cosas distintas, casi antagónicas, puesto que las doctrinas o las ideologías son sugestiones dirigidas al inconsciente pasional de la población desde el poder y son dogmáticas; además tienen el vicio de tergiversar a la Historia y por ende a la verdad. Mientras que el hecho de pensar es un acto mental de la razón que desmonta cualquier dogmatismo ideológico, como pueda ser el nazismo o el comunismo. Pero claro, Como  este país desde la Contrareforma no sabe muy bien cómo razonar, se sigue confundiendo la doctrina,la ideología política por el pensamiento; es decir. Se sigue confundienco el significado de las palabras; o lo que es lo mismo, la gimnasia con la magnesia y en éso estamos.

                                                               FRANCESC MIRALLES