LA TERCERA JUVENTUD (Divino Tesoro 1-3 Final)
LA TERCERA JUVENTUD
(Divino Tesoro 1-3)
Pero sus hijos se dieron cuenta que ya no podía estar sola, terminando por meterla en un centro para adultos. Trini cuando tenía ráfagas de lucidez, lloraba, pero a los pocos segundos, ya no se acordaba porque lloraba.
Trini ya no sabía para que servía una cuchara o un tenedor. Dejo de saber masticar, incluso de tragar. Trini se quedo metida en su mundo, un mundo donde dicen que no hay nada, pero donde para otros es un mundo sin recuerdos, ni dolor. Pues para unos fueron años de felicidad, para otros fueron años de tristezas y perdidas.
Caminaba día, tras día. Nunca miraba hacia delante, siempre iba mirando abajo. Una mañana, no sabía bajar los pies de la cama. Su cuidadora asignada le decía;
---- Trinidad, baja los pies, mi niña ayúdame, tu puedes.
Trini se reía, la miraba o sencillamente solo sonreía a esa auxiliar que pensaba que era algo suyo. Suyo, como familia, como su madre, como su hija, como sus nietos o tan solo un recuerdo.
Algo que le perecía como su más preciada joya. La veía todos los días, la duchaba, le daba el desayuno y la comida. A cambio Trini le sonreía y la besaba. Aunque no fuera realmente su familia , pero para Trini era , un abrazo, un beso, un te quiero. Un segundó, un minuto, unas horas, una vida, un recuerdo.
Pasaban los días mirando por los cristales. Enfrente estaba las montañas, veía los pajarillos volando, sentía el viento soplar, escuchaba las gotas caer cuando llovía. Todo era antiguo y a la vez nuevo para ella. Su mente sin recuerdos, ni dolor, tan solo lloraba de vez en cuando sin saber por qué.
Miraba a su cuidadora, esta se acercaba, la besaba y le decía;
--- lo que te quiero mi niña.
Le pintaba las uñas, la peinaba y incluso con el consentimiento de su tutor, le tintaba el pelo. Ahora Trini es feliz, sonríe, te mira y en este momento, su ser más cercano, eres tú ‘su cuidador/a´. Ese ser humano que sin ser parte de su sangre, le da cariño y amor.
Un día Trini decidió no volver abrir la boca. De pronto pensó, dentro de la poca memoria, recuerdos o sencillamente una ráfaga de lucidez, decidió por decisión propia, no volver a comer, muriendo a los pocos días en paz con sus familiares y su cuidadora.
---Decidió no perder los pocos recuerdos que le quedaban, por ráfagas que fueran.
---Decidió por decisión propia y como por instinto, vomitar todo aquello que le obligaban a comer.
--- Decidió morir con dignidad y en paz, teniendo una vida completa y de calidad, dentro de su propio mundo, pudo decidir, por última vez, donde los demás, tuvieron que aceptar.
Se fue sin saber porque lloraba, porque reía, porque sufría. Pero llena de amor de sus seres más preciados y que ella tanto creía que eran de su propiedad.
Un día Trini, se dirigió a la nevera, miro el almanaque, vio el día que era, lo cogió, se sentó y con él en las manos miro al pasado. Ese pasado que aunque para unos es triste para otros son días dichosos y llenos de felicidad, sin olvidar que son recuerdos metidos en una memoria llena de obsequios obtenidos durante una vida plena y seguro intensa.
PASADO; tu, el, nosotros, vosotros, ellos y yo
PRESENTE; tu, el, nosotros, vosotros, ellos y yo
FUTURO; tu, el, nosotros, vosotros, ellos y yo
Trinidad somos todos, pasado, presente y futuro.
Fin
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