E.T.
Era un universo lleno luz, vida, armonía. Rodeado de pequeños mundos, donde habitaban seres con ganas de ver el universo, aprender, sentir, tener experiencias nuevas.
Desde un meteorito de grandes dimensiones, se encontraban dos energías observando cómo se formaba la tierra. Cada vez que encontraban un instante en un tiempo irreal para ellos, se escapaban para poder ver lo maravilloso y único que era el crecimiento del universo.
Conforme pasaba el tiempo, un tiempo sin minutos, sin días, sin meses. Un tiempo donde ellos lo median por experiencias, iban observando cómo crecía algo, redondo y cada vez más difícil de poder fijar la vista. Pues era cada vez más brillante, luminoso, incluso para ellas, (energías) que estaban acostumbradas a la luz.
Poco a poco vieron como se iba formando un sistema solar, rodeado de pequeños planetas. Entre esos planetas, se encontraba la tierra. No daban crédito a lo que estaba percibiendo en esos momentos, empezó ese pequeño mundo, a tener vida propia.
Empezó como de la nada, a emanar agua de adentro, a la superficie. Al cabo del tiempo, notaron que crecía algo en su suelo. Era hermoso, para su visión. Notaban que era algo desconocido para su sabiduría. Dentro de sus experiencias de crecimiento, no encontraban ninguna explicación a lo que estaban observando.
Estas energías, con vida propia, estaban acostumbradas a pasearse por todo el cosmos. Habían poseído, toda clase de cuerpos, para poder crecer en sabiduría y así poder subsistir en los planetas. Habían tenido tantas vivencias como, su corta luz se lo había permitido.
Pues hasta ellos se debían, a un crecimiento interior, basándose en las propias experiencias personales. Para poder uno conocerse mucho mejor dentro de su acciones, hasta llegar a la perfección.
Estas pequeñas vidas, aunque no por ellos menos importantes. No se encontraban solas en el universo. Realmente, en toda la galaxia, convivían millones de esos seres de luz. Eran como si fueran civilizaciones. Por todo el cosmos, había vida.
Estas energías les llego el momento de tener que poseer un cuerpo, ya fuera materia, etéreo, luz, etc., dependiendo del planeta que les tocara. Para poder seguir su camino hasta llegar a adultas.
La tierra ya estaba formada, tenia agua, naturaleza, animales y el hombre. Decidieron poseer un cuerpo en el nuevo planeta. Para poder oler, sentir, tocar, todo lo que con otros cuerpos no podían experimentar. Pero ellos no se podían imaginar, la sorpresa que le estaba guardando la tierra.
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