Es increíble como alguien puede hacerte sentir como en casa, tranquilo, seguro, sabiendo que pase lo que pase él está allí para protegerte, hasta que todo se derrumba, hasta que la casa se convierte en trozos de cimiento tirados por el suelo, sin ningún valor. Siempre se dice que cuides de las personas que te hagan sentir como en casa, pero no se dice que esa misma persona puede destrozar la casa sin importarle el daño que te haga. Pintar un cuadro es fácil, lo difícil es cuidar de ese lienzo, que no le pase nada, verlo cada día con los mismos ojos llenos de admiración que cuando acabaste de pintarlo, mantenerlo a salvo de cualquier cosa que pueda dañarlo, romperlo o destrozarlo. El problema es que nadie sabe cuidar un cuadro ni darle el valor que realmente tiene y se merece, simplemente pintan y lo arrumban en una esquina de su cuarto hasta que se estropea, se apaga y ya no tiene valor.
Así es como destruyen a las personas mas buenas y que mejor les van a cuidar, por qué? Es una pregunta que me hago, pero no creo que encuentre la respuesta nunca.
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