MI INCREIBLE AMIGO OSCAR 2 (FINAL)
Por franciscomiralles
Enviado el 30/09/2023, clasificado en Fantasía
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Llevado tanto por la curiosidad como por mi anhelo profesional para solucionar el problema de mi paciente que era lo que más importaba, ya que Sergio tenía que desembarazarse del fantasma de Oscar Wilde para vivir su vida con plenitud, quise profundizar en la manera de pensar del supuesto escritor inglés y desmontar la posible fabulación.
-¿Qué te parece la manera de vivir del siglo XXl? - le pregunté a Sergio en plena sesión hipnótica.
La expresión de Sergio hizo una mueca de desagrado.
- Es demasiado vulgar. Veo que en mi siglo, el arte empezó a volverse cada vez más prosaico reflejando la desnuda realidad. ¿Para qué pintar, o escribir sobre lo que está ante nuestras narices y lo vemos todos los días? ¿Quiere saber cuál es el secreto de la vida? - me dijo el supuesto Oscar.
- ¿Cuál es?
- La imaginación. El hombre es bien poca cosa si es incapaz de imaginar. Es lo que en realidad mueve al mundo. A veces me han invitado a hacer una excursión al campo, pero siempre he rehusado, porque la Naturaleza vista de cerca es cruel, y abrupa y en ella abundan los insectos que te pican. En cambio un buen artista; un pintor por ejemplo, o un poeta toma como materia prima a la misma Naturaleza y la recrea; la reinventa de nuevo y le sabe conferir una belleza única, especial que tal vez ésta en realidad no la tiene. Digamos que este artista de acuerdo con su propia individualidad actúa según la voluntad de Dios ¡No me gusta la gente práctica que es incapaz de darle este sabor a la vida! Es más el Estado propicia como cultura la ignorancia general que no llega a ninguna parte, y al hombre que es un genio creador, al diferenciarse de la masa es calumniado y rechazado por ella - expresó con vehemencia Oscar en la boca de mi paciente Sergio- .¿No está usted de acuerdo conmigo?
- A medias. El reflejar en el Arte la realidad, se debe a que estamos viviendo en el pensamiento cientifico que es inductivo y empírico, el cual ya empezó a desarrolarse en el siglo en el que viviste tras el declive del Romanticismo y sirve para señalar los problemas de la sociedad con el objeto de poderlos solucionar - repliqué yo-.Además, ahora el lenguaje ha cambiado respecto a otras épocas anteriores que podia ser más discursivo y se confiaba más en la divinidad. Ya nadie se acuerda de la mitología griega o de la Biblia. Ahora, de acuerdo con este pensamiento inductivo, algunos... sólo algunos quieren ahondar en el pasado para saber lo que había de verdad y de mentira a lo largo de la Historia.
El supuesto Oscar Wilde se quedó en silencio durante unos segundos y posteriormente prosiguió:
- Lo sé. Todo esto lo sé. ¿Y qué se ha ganado con ello? ¿Se es más feliz caminando a ras de tierra?. Ya sabemos que en un bosque hoy en día no encontraremos al semidios Perseo, que era hijo de Zeus y de la mortal Dànae, quien mató a la medusa gorgona de múltipes cabezas; así como el Cristianismo ha enmudecido quizás para siempre. Pero toda esta mitología que formaba parte de los sueños de nuestros antepasados de nuestro más inconmensurable espíritu occidental, en suma de nuestra cultura, alentaba una vida renovada en la que subyacía un amor individual hacia todo lo que nos rodeaba. Porque el gran motor del ser humano es el amor, como decía Dante, y no este egoista materialismo que se ha apoderado de la sociedad como un pulpo agarra a su víctima en la profundidad del oceáno. Al perder nuestra capacidad de imaginar, también nos perdemos a nosotros mismos; a nuestro amor propio y es cuando viene la decadencia de nuestra sociedad. Lo triste es que ahora estamos instalados en la emoción del odio.
-Lo que dices tienes tu parte de razón. Pero ahora es imposible volver atrás. Yo creo que en la actualidad para que el ser humano vuelva a creer en sí mismo, deberá de asumir su conciencia cósmica. Pero esto no será de una manera idealizada, sino que será a pequeños pasos y con grandes tensiones sociales porque la vida no va nunca en línea recta - arguí yo-. Lo aconsejable es que nuestra mente no sea dogmática ni rígida en nada. Se puede ser práctico, y a la vez romántico; pues en nuestra mente funciona tanto el lado emocional, como el lado racional y ambos se complementan. Pero cambiando de tema, me extraña mucho que un hombre tan sutil y tan inteligente como tú se dejase subyugar por un tipejo tan negativo y tan estupido como con el que te relacionaste que por sus líos acabaste en la cárcel. Aquí en parte la culpa fue tuya, porque no siempre todo lo bello es bueno. Reconoce que fuiste demasiado platónico.
- ¡Sí, sí...! Lo reconozco y lo digo en uno de mis enayos.
- Tú perteneciste a una privilegiada clase social inglesa, y te decantaste por el Socialismo...
- Claro que sí. Un Socialismo que eliminara un Capitalismo egoísta, porque la base de todo es el amor, el cual diera la oportunidad de que el ser humano cultivara su individualidad mediante la belleza del Arte y de la cultura.
- Sin embargo el Socialismo en nuestros tiempos es tiránico y actúa de manera contraria. Fomenta una sociedad gregaria, desprecia al individualismo, y sólo viven bien los dirigentes que están en la cúpula. Creo que eres demasiado utópico
- Por eso no soy feliz en esta nueva reencarnación.¿Pero qué sería de nosotros si no fuesémos un poco utópicos?
Mi paciente Sergio Vilallonga hizo la psicoterapia que le aconsejé, y pudo controlar el sueño recurrente de ser Oscar Wilde encarcelado. ¿Será mentira, será verdad que el alma del escritor inglés subyacía en la mente de mi paciente? No descarto la posibilidad.
Lo que sí sé es que el discurso del posible Oscar Wilde me convenció de tal manera; pues había que volver a recuperar el sentido de la belleza de la vida a través del Arte para amarnos más a nosotros mismos puesto que yo tampoco me sentía feliz en esta sociedad tan desequilibrada, que tomé nota de un restringido círculo que frecuentaba Sergio Villalonga que defendía la filosofía de aquel escritor inglés y me apunté en dicho Club
FRANCESC MIRALLES.
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