Mi esposa comparte mis fetiches y le encantan. Fetiche 4
Por AlexMx
Enviado el 17/10/2023, clasificado en Adultos / eróticos
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Me encanta, me fascina. Me vuelve loco de placer que vean desnuda a mi esposa. Ya sea cuando otro hombre o mujer se la cogen, o en fotos. Y ese es mi fetiche. Que vean desnuda a Victoria. Que la morboseen, que la deseen, que se les pare la verga o se les moje la pusa viendo el cuerpo delicioso de mi mujer. Y me gusta que la vean cara a cara, pero quizá me excita más cuando yo enseño sus fotos desnuda y cogiendo conmigo... o con otros. Y por eso muchas veces tenemos "sexiones" fotográficas con ella modelando desnuda para mí... o para otros. Y yo tomo las fotos y videos y siempre los llevo en mi celular para mostrarlos cuando desee y a quien sea. Pero también hemos dejado que amigos la fotografíen desnuda, y en poses que van de lo erótico a lo pornográfico. Fotos y videos de modelaje pero también de ella cogiendo conmigo y con otros. Son verdaderos videos y fotos porno.
Mi fetiche empezó hace muchos años con mi primera novia Marlen (todavía guardo algunas fotos viejas Polaroid, de ella desnuda). Me dejaba tomarle fotos desnuda y nos encantaba. Y supuestamente eran para nuestro placer y muy "privadas"... pero el "gusanito" de enseñárselas a un amigo muy cercano que yo tenía (Gustavo, con quien tuve mi primer contacto sexual de juventud) ya me había picado. Me excitaba sobremanera pensar en que Gustavo viera a Marlen desnuda y saber qué pensaba, pero más que nada me daba placer pensar que mi amigo la desearía y querría cogérsela (así se fue cimentando mi gusto por "compartir" a mis parejas con otros). Sin decirle nada a Marlen se las enseñé a Gustavo y él se excitó tanto que se sacó la verga y se empezó a pajear viendo a mi novia desnuda... por supuesto que no me aguanté y quité su mano y la remplacé por la mía... y después por mi boca (siempre me ha encantado mamarle la verga, pequeña, gorda y muy oscura y con prepucio). Cuando Gustavo me llenó la boca con su semen yo también me vine -casi sin tocarme- porque estaba hirviendo sabiendo que él estaba teniendo un gran orgasmo viendo a mi novia desnuda. Y por supuesto sus comentarios me encantaron y él estaba asombrado de la gran mata de pelo negro que Marlen tenía entre las piernas... y me dijo que le encantaba (aunque le hubiera gustado que ella tuviera tetas grandes y no minúsculas como las tenía) y que yo tenía mucha suerte de poder cogerme a una mujercita así de caliente. Así que cada vez que yo le tomaba nuevas fotos desnuda a Marlen, después se las enseñaba a Gustavo y volvíamos a coger como antes. Yo mataba dos fetiches de un tiro, que miraran desnuda a mi novia y poder mamarle la verga a otro hombre y recibir su semen en mi boca. Más adelante contaré cómo continua la historia con Gustavo, pero sí, también hicimos un trío con él y Marlen. Fue mi primer trío HMH. Con Marlen en los siguientes 18 meses que fuimos novios hicimos más tríos con otros amigos míos. Ya contaré de esas experiencias que fueron deliciosas. Cuando terminamos la relación, ya Marlen era una puta graduada y consagrada.
Con mi segunda novia, Rocío, no pude cumplir este fetiche. Ni me dejó tomarle fotos desnuda ni mucho menos que la compartiera con mis amigos. El sexo fue muy básico y simple y cuando traté de hablar con ella, con toda honestidad de mis gustos sexuales, no me dejó decir nada. Fue el principio del final. Era una jovencita deliciosa pero el carácter y la personalidad la arruinaban.
Con Carol cambió un poco la cosa... sí me dejó tomarle fotos desnuda y cogiendo nosotros; pero nunca aceptó que hiciéramos tríos (más que nada no quería que si yo le permitía coger con un mi amigo, ella tendría que darme la oportunidad de coger con otra mujer o con alguna de sus amigas). Y como Carol era una gordibuena muy joven, fue delicioso ponerla a posar desnuda. Todavía tengo algunas de esas fotos, las que logré "ocultar" porque casi que me obligó a dárselas cuando terminamos el noviazgo. Y sí, sin que ella supiera enseñé sus fotos a Gustavo y muchos otros amigos, pero sexo bi sólo con Gustavo.
Patricia también me dejó tomarle fotos desnuda, y las que guardo con mayor cariño y las que veo cuando me pajeo pensando en ella y recordándola, son en donde ella tiene las axilas peluditas. Me calientan y me fascinan, por eso cuando mi esposa y yo cogimos con ella, Victoria ya la conocía desnuda y se dedicó a gozar ese cuerpo que tantas veces había visto desnudo en las fotos que guardo. Con Alicia tampoco pude tomarle fotos desnuda, no porque ella no quisiera; le fascinaba ese fetiche mío y ella es una exhibicionista consumada, sino porque como estaba casada no quisimos correr ni el más mínimo riesgo de que su esposo pudiera ver esas fotos o saber que yo la había fotografiado desnuda... y menos que éramos amantes.
Así que cuando me hice novio de Victoria y al poco tiempo después nos casamos, tuve libertad completa para tomarle fotos desnuda y para enseñárselas a mis amigos, con pleno conocimiento y aprobación de ella. Es más, le chorreaba la pusa en lo que le contaba cómo reaccionaron los hombres a los que les enseñaba sus fotos y qué decían y qué opinaban de ella y de su cuerpo. Y como ya habíamos cogido con Gustavo, Paty, Alicia y el trío con Sandra y Miguel, quisimos hacer algo más.
Teníamos un amigo que era pintor, muy famoso y conocido. Y era el maestro de pintura de Victoria. Fue la "víctima" perfecta para pedirle que él le tomara fotos desnuda a mi esposa, con la "excusa" de que cómo él era un gran artista tendría mejor "ojo" para hacer fotos de desnudos artísticos y que Victoria pintaría su autorretrato desnuda. Y así fue.
Victoria llegó con un traje de licra, ceñido al cuerpo, blanco y como no llevaba ropa interior todo se veía y notaba perfectamente. Ella se desnudó delante de él sin ningún pudor y empezó a posar. Cada pose ella iba aumentando el morbo, abría las piernas, se agarraba las tetas, miraba al amigo con ojos de puta... y yo le dije al pintor que no tuviera pena, que si necesitaba "tocar" a Victoria para que la pose fuera mejor, que lo hiciera sin ningún problema. Por supuesto que Manolo (el amigo pintor) empezó a tomarse libertades con el cuerpo de mi esposa, haciendo como que era para que la pose fuera mejor, pero en realidad era que le estaba metiendo mano y con mi aprobación y enfrente de mí. Yo ya tenía la verga durísima.
Ya contaré de este encuentro con más detalle, en otro relato, pero sí, tuvimos un trío que comenzó con Victoria cogiendo con él y yo como espectador, pero después me uní a ellos y estuvimos como cuatro horas cogiendo delicioso. Fue un trío mejor que con Gustavo y muy parecido a lo que hicimos con Sandra y Miguel.
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