VACACIONES (Quarters 3/1-2)

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Enviado el , clasificado en Intriga / suspense
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--¡Perdone, disculpe¡

--¿Si, dígame?

--Ya hemos aterrizado

--Gracias.

Anaïs hizo un pequeño suspiro, miro por la ventanilla, se giro, agarro su pequeño ordenador, su teléfono y una mochila. Se levanto empezando a caminar hacia la puerta. Le dio las gracias de nuevo a la azafata por despertarla y teniendo pinta de una turista más, sin ninguna señal de llamar la atención de los guardias de la aduana, ni ningún guarda jurado del aeropuerto, ni de ningún trabajador, pasando desapercibida salió por las puertas del aeropuerto. Vio un taxi se subió y dio la dirección donde quería que la llevara. En ese momento cogió el teléfono, miro la hora, dándose cuenta que su gran amigo y compañero de detective en Washington, llamado J.Edgar, estaría ya trabajando, decidió mandarle un mensaje por WhatsApp que decía;

--¡Hola! J.Edgar, necesito urgentemente que me llames enseguida que puedas.

Al poco tiempo Anaïs llego al hotel. En el momento de entrar en la habitación, sonó el teléfono siendo su amigo, que tan solo, hacia 15 minutos le había mandado un sms.

--¡Hola Anaïs!, ¿dime? que ocurre.

Anaïs lo puso en un periodo de corto tiempo, al corriente de todo.

--¿Necesitas, que vaya y te ayude?

--¡No!, solo necesito que recopiles toda la información que tengas, de desapariciones de jóvenes o adolecentes, sin resolver, cerca o por los alrededores de la estación de Indios Verdes, en México. Necesito que busque los nombres que tienes en los ficheros ocultos de los grandes, de la mafia, drogas o prostitución de México. También necesito si tenemos a alguien conocido y a quien poder tirar en la policía si me hiciera falta.

-- Está bien, mañana tendrás todo lo que me pides. Por cierto, me estoy acordando que Irían estudio en la academia de aquí contigo, pero creo que trabaja en México y su padre pertenece al partido que en este momento está en el poder. Puede que te sirva en un futuro.

--Esperemos que no. No me gustaría molestarlo. Pero tranquilo, has hecho bien en recordármelo. Gracias, espero noticia tuyas.

Anaïs después hablar con J.Edgar, llamo a Julián para decirle, en que hotel se encontraba. Era un hotel pequeño. De tan solo dos estrellas, parecía más una pensión que un hotel. Pero nunca le gusto alojarse en sitios lujosos, siempre quiso estar en uno donde pudiera trabajar tranquila, pasar desapercibida y mezclase con los ciudadanos de los barrios más, de clase media.

Al poco tiempo llego Julián, le dio todos los datos, mas toda la información que él había podido averiguar en esos dos días. Anaïs puso todo encima de la mesa y salieron dirección a la comisaria. Al llegar Julián solicito hablar con el funcionario a cargo del caso de las niñas. Dándole largas el policía que en ese momento se encontraba en el mostrador y estando cansada  Anaïs de ver tanta pasividad hacia ellos, saco de su bolso una tarjeta, dándosela al funcionario y le dijo;

--Por favor, dele esta tarjeta a su superior. Dígale que deseo hablar con él.

El señor que los estaba atendiendo, cogió la tarjeta, se levanto, dirigiéndose a un despacho a unos metros de ellos. Saliendo de esa habitación, un hombre de mediana edad, serio, vestido de oficial, andando hacia ellos.

--¡Hola!, soy Pedro, ¿en qué puedo ayudarle?

--¡Hola! Yo soy Anaïs, necesito saber cómo va la investigación de las niñas Jessica y Olga, ¿saben algo o todavía no tienen ninguna pista?

Pedro los invito a que los acompañara a su despacho. Una vez dentro le informo que todavía no tenían nada claro, pero que confiara en ellos, porque estaban haciendo todo lo necesario para encontrarlas. Le dio unos datos de la estación donde desaparecieron y le informo que era un espacio donde diariamente desaparecían muchas jóvenes. Creen que algo hay en los túneles que ellos todavía desconocen, pero piensan que esa estación, es un punto clave para la investigación.

Anaïs y Julián volvieron al hotel, pero viendo Julián que su compañera se encontraba cansada, la dejo y el volvió a su hotel con su esposa, decidiendo verse, por la tarde para empezar a investigar desde la estación de  Indios Verdes. Anaïs se tumbo quedándose profundamente dormida. Cuando de pronto se vio sentada en una alfombra de espaldas a su hermana, mostrándole esta unas imágenes. Quedándose Anaïs sin poder moverse, ni pronunciar palabra alguna.

 


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