EL CUERPO (1-2)

No daban crédito a lo que estaban viendo. Se percibían cinco esferas perfectas, cada una con cuatro círculos y un triangulo perfectos. Parecían que los habían medido para que sus medidas todas fueran iguales. En el centro se encontraba las más grande de todas y la única con los tres orificios en cada punto del triangulo, introducidos hacia dentro de la tierra. Las otras, eran más pequeñas, pero puestas en simetría a la más grande de todas.

Al bajar del helicóptero decidieron mantener la investigación en secreto. Tan solo los más cercanos al caso, podrían estar al tanto de todo. No deseaban que el lugar se convirtiera en el centro de atención del mundo entero. Lo que menos necesitaban en este momento, era tener a personas por los alrededores del suceso.

Como era tarde, todos decidieron irse a dormí, dejando todo custodiado y un guardia, vigilando y observando por las cámaras. El forense venido de chile, llego el primero. Pero no pudiendo empezar, hasta que el de Argentina llegara, decidió irse a descansar, para empezar la autopsia, enseguida que su compañero llegara.

Al día siguiente se dirigieron todos a donde se encontraba el cuerpo. Pero cuál fue su sorpresa, que dicho cuerpo había desaparecido, sin dejar rastro ninguno de su fuga. Dirigiéndose a las cámaras, notaron que por algún motivo, el guarda se quedo dormido, sin, ni siquiera él, darse cuenta.

Vieron a una joven de unos 28 años. Tenía una gran melena, de pelo blanco. Pero desde la raíz hasta la punta del cabello, iba cambiando de color blanco hasta llegar a ser oscuro. Sus ojos tenían unos rasgos desconocidos, pero atractivos para la vista del ser humano. Vestía un mono azul  cielo y la acompañaba otra persona, en este caso era un varón, muy parecido, por no decir gemelos, si no fuera porque se veía mucho mayor, que  el cuerpo encontrado, en la entrada del volcán.

Dirigiéndose hacia donde estaba el cadáver, se vio como la joven se le acercaba, flotándose las manos y seguidamente,  poniéndoselas  por encima del cuerpo, sin llegar a tocarlo. Se notaba que le trasmitía energía que salía de las palmas de la mano. De pronto se noto como el cuerpo del joven daba pequeños saltos al aire, sin salir, ni caer de la camilla donde estaba depositado, empezando a mover, los dedos de las manos.

Al poco tiempo, las dos personas se les ven salir del recinto, levitando el cuerpo y a los pocos metros introducirlo dentro de un aparato que se encontraba camuflado, a poca distancia del campamento.

Todo el personal allí presente no podía dar ninguna explicación lógica a lo que veían con sus propios ojos. Todos se miraron, ninguno encontró respuesta a lo que están presenciando, terminando por decidir, ir a una base militar y mirar los satélites y intentar averiguar donde se habían dirigido el aparato.

Mirando los satélites observaron que el aparato se dirigía al Océano Pacifico. Cuando de pronto visualizaron que volvía a bajar, pero esta vez, para introducirse dentro del mar. En el triangulo del Diablo, tan bien llamado, triangulo de las Bermudas.

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