Guerra en las Galaxias. Sol y Luna (1-3 Final)
Por Merced 54
Enviado el 28/04/2024, clasificado en Ciencia ficción
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Estos seres llamados Dracos, Grises e Icetoides, todos negativos, destructivos. Con unas mentes destructoras y con ansias de poder, de ganar terreno y colonizar tierras para su beneficio, como granjas de trabajo, alimento y crecimiento de ellos, sobrepasando límites de aniquilación y destrucción. Estos seres que su alimento es el dolor, el miedo, el sufrimiento, las miserias. Todo donde un ser con un poco de claridad sufre y siente, el sufrimiento de su vecino, para ellos es su supervivencia, su sustento y lo que les ayuda a seguir viviendo. Sobre todo el producir energía, luz con tan fuerte intensidad, que genera vida a sus planetas. Necesitan de nuestro dolor, de nuestra impotencia y de nuestra frustración, para que nuestro organismo, produzca un alto voltaje de luz dimensionar. No visto al ojo humano, pero capaz de traspasar fronteras dimensionales. Para mantener sus planetas con vida.
Empezaron una guerra donde varias colonias y planetas se destruyeron. Entre ellos Orión y la Luna. Estos seres, aniquilaban todo lo que encontraban a su paso. Siendo incapaces de evolucionar y crecer por el hecho de ser de sangre fría. Se daban cuentan, que sus razas no podían seguir el ritmo de las demás, por lo tanto, empezaron a buscar, otras formas de seguir existiendo y no desaparecer. Tiraron una bomba de plasma al astro llamado Luna. Que por aquellos tiempos estaba vivo y era un astro del planeta Júpiter. Los ancianos, Federación galáctica decidieron traerla, acercándola hacia el planeta tierra, introduciéndole algo parecido a un ordenador, a un reloj de los de antes, para que hiciera la función de sostener la rotación de la tierra y del planeta Marte.
La luna no tiene vida, es artificial. Preparada y puesta para trabajar junto con todo lo preparado y diseñado para un planeta llamado tierra, hecho de la materia más densa, jamás imaginado en una mente de cualquier ser humano. Sus limitaciones de entendimiento, para cualquier ser del planeta, sería imposible de entenderlo con una mente cuadrada.
El Sol es oro liquido (Alquimia menté ablando). El oro en la tierra son los botones del sol, que entran en el proceso de trasformación, por la fotosíntesis mediante las plantas y cuando pasan por las raíces a la tierra, Gaia madre tierra dosifica los botones convirtiéndolos en minerales, como todos conocemos; el Oro actual.
El Oro de nuestra tierra, fue utilizado, para reparar la atmosfera de un planeta, que fue medio destruido en las guerras de las galaxias. El oro convirtiéndolo en partículas minúsculas, puede reparar una atmosfera, no permitiendo dejar entrar nada dentro y pudiendo permitir que ese planeta donde se destruyo, pueda seguir teniendo vida en la superficie. Hace de barrera, no permitiendo traspasar nada, ni siquiera un microbio.
La tierra tiene dos soles. Uno esta fijo y el otro órbita alrededor del planeta y se posiciona al lado del sol nuestro cada 3.600 años que tarda en girar alrededor de la tierra.
La tierra no es plana, ni redonda, es como diría, como un huevo ovala. Y cada tiempo cuando cambia su rotación y los polos cambian, se descongelan para congelarse otros puntos, se vuelve como más ondula. Más o menos.
La tierra está viva, la tierra crece. La tierra abre océanos nuevos, rutas nuevas y por supuestos islas nuevas. Mientras que en su proceso desaparecen otras y cambian de sentido.
Joshua había algo que le rondaba por la cabeza, El Ciprés lo vio pensativo y le dijo;
--¿Qué te ronda por la cabeza? Amigo mío.
--Pensaba si Gaia siempre estuvo encarnada en la tierra. Pensaba si siempre supo que sería la vida, la esencia del planeta. Pensaba, si tuvo el mismo proceso que nosotros en la evolución o simplemente entro a formal parte del planeta sin más.
--Gaia tuvo, entre 70 y 80 vidas encarnada, una de ellas estuvo con María Magdalena y María como las conocéis en tu mundo, fueron las tres con la esencia del espíritu madre en el tiempo de Isis o iris. Gaia cogiendo sabiduría, experiencia y conociendo a la humanidad, para poder lidiar con vosotros, que desde luego no sois fáciles de llevar y mucho menos de sostener. Sois muchas razas planetarias juntas. Y no me refiero razas del planeta, si no razas de la galaxia, todas mezcladas aquí, en vuestro planeta. Muchas culturas diferentes y por supuesto cada uno sois como diría; tenis el Ego muy alto, por lo tanto, sois un poco difíciles de aguantar. Se le preparo antes de ser la guardiana, la señora, la madre del planeta. Aprendió y evoluciono como vosotros. Es más, todavía está creciendo, todavía está evolucionando y aunque no lo notéis, ella como vuestra madre os protege, os cuida e intenta no dañaros en el duro y doloroso crecimiento en que se encuentra el planeta. Gaia podría sin más hacer el cambio de giro, saltar de una dimensión a otra y seguir su ritmo sin necesidad de cuidar de nadie y sin embargo lo está haciendo tan sumamente tan lento, tan suave que nadie se está dando cuenta y mucho menos notando. No digo que ocurran ninguna catástrofe natural en el proceso del cambio, junto con pérdidas humanas; por supuesto que ocurrirá, pero es inevitable, ¿Que cambio, no causa dolor?, ¿ Qué proceso no causa daños? ¿Que no pierdes, mientras vas creciendo? Muchas cosas, tanto materiales, como personales. Pues a Gaia es igual, aunque hará todo lo posible de que sea el menos daño, a la creación, pero como te dije, no se podrá evitar. Porque todo crecimiento, conlleva despojarse y soltar muchas, muchas cosas unas que suelen estar de sobra, y otras, muy apreciadas, pero inevitables. Pero eso es el progreso.
Joshua de pronto despertó, miro el reloj, vio la hora, se despidió de su amigo y volvió a su cabaña a esperar el nuevo día. Cada vez, con una nueva visión de conciencia de lo que significa la palabra Amor, evolución y dejar partí a todo aquello, que aunque uno lo ama más que nada en el mundo, a veces se necesita cerrar los ojos y desear un buen viaje, aunque por dentro uno sangre de dolor.
Fin
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