Denunciar relato
En la cima de la montaña, el silencio es mi refugio mientras el viento susurra secretos antiguos. Me detengo a contemplar el abismo, y veo el valle, donde las sombras de mi vida se desdibujan. Allí, entre las nubes, encontraré la respuesta a mis preguntas.
A veces lo más alto no es un lugar, sino un estado del alma y la verdadera conquista no es la altura, sino el viaje que le lleva a uno a redescubrirse a sí mismo.
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