LA "LUZ" INTERIOR 3 (FINAL)

Hubieron algunos encuentros más con aquella especial mujer hasta que no pude vivir sin ella. Por tanto decidí dar un drástico cambio a mi vida; concetamente romper con mi matrimonio, con mi esposa Carlota la cual como es de suponer cuando se enteró de que había otra dama de por medio puso el grito en el cielo. El vendaval de su ira me azotó brutalmente en el rostro sin piedad alguna.

- Pensar que me has estado engañando todo este tiempo no tiene perdón de Dios Tomás. ¡Me has caído de arriba abajo! Y nunca, nunca hubiese creido que fueras tan vil, tan falso y tan desgraciado! - me gritó Carlota entre sollozos llevada por el despecho-. Pero no te saldrá bien esta jugada Tomás. Cuando esta niñata vea que eres un egoísta de mierda te dejará sin pensarlo dos veces y te verás solo,, compleamente solo porque yo ya no quiero saber nada más de ti. Esto que me has hecho no te lo perdonaré nunca, y me las pagarás - amenazó-.¡Ya lo creo que me las pagaás. ¡Y ahora vete, vete de esta casa! ¿Me oyes?

- Claro que me voy - respondí yo-. Pero no hagas comedia porque tú sabes muy bien que entre nosotros ya no había nada. En realidad yo a ti jamás te he importado gran cosa.

-¡Esto no es verdad! - protestó Carlota.

-Oh ¿Qué vas a decir tú? Yo soy el villano por querer ser el dueño de mi vida y tú  eres la gran martir - dije con sarcasmo.

Tras aquella penosa escena recogí algunas de mis cosas imprescindibles y me instalé en un piso de la calle Mallorca que era propiedad de mis padres.. Francamente no entendía muy bien el porqué mi excónyuge se disgustó tanto con mi nuea vida, cuando a ella lo único que le había importado siempre había sido mi situación económica y sobe todo su condición de señorona casada ante las cotorras de sus amigas. Tal vez se sintió herida en su orgullo, más que en un amor fallido. "El muy cabrón me ha engañado con una niñata, después de lo mucho que he hecho por él y así me lo paga- les diría Carlota a las amigas con lágrimas de cocodrilo en los ojos para que la compadecieran-. Pero ya se arrepentieá ya. Y si quiere volver, juro por Dios que las cosas ya no serán como antes".

Di por descontado que mi hijo Sergio se posicionará al lado de su madre, y ambos se pondrán en mi contra. Pensarán que yo soy un desalmado y esto es lo más difícil de digerir porque yo siempre he querido a mi vástago. Sin embargo ya no podía echarme atrás en mi decisión.

También me viene a la memoria las amonestaciones de mi convencional amigo de la oficina Rodrigo, en un bar mientras tomábamos una cerveza.

- Dejando aparte lo esrupenda que pueda ser tu nueva amiga, ella bien podría ser tu hija. ¿Has pensado en esto? - me dijo él con un aire de suficiencia-. Es más. No esperes nada exraordinario de esta vida en común con esta Beatriz,porque podrías llevarte una desilusión muy grande.

-¡Bah! Eres un pájaro de mal agüero. No seas hipócrita hombre, porqué ¿qué más quisieras tú haber encontrado a una mujer tan especial, tan luminosa como es Beatriz eh? - le respondí desafiante.

- ¡Déjate de bobadas Tomás y escucha!- se crispó Rodrigo-. Tú confundes la belleza con la bondad; la esética con la ética y no todo lo que es aparentemente hermoso, brillante es bueno, ya que en realidad todos somos mitad ángeles y mitad demonios- me dijo con convicción-. Creo que tú has idealizado demasiado a esta joven, pero has de saber que ella al igual que todo el mundo es hija de su presente, que ahora está regido por la incertidumbre. Lo que hoy es blanco mañana es negro; hoy se trabaja en una cosa y mañana en otra. Y esto en medio de la revolución tecnológica que lo abarca todo. Mientras que en ti todavía gravita un pasado en el que las generaciones actuales ya no creen. Son dos maneras muy distintas de enfocar la vida. Pero además de éso en la convivencia diaria es donde se ven más los defectos del otro. Y como hoy en día no hay paciencia para aguantar nada de nadie, esto te puede perjudicar. Por tanto yo a esta relación no le veo ningún futuro a medio plazo.

Estaba claro que mi convencional amigo Rodrigo no tenía ni idea de cómo era Beatriz, quien me había instado a que me hiciese socio de MÉDICOS SIN FRONTERAS, porque a su juicio ahora que el mundo se había hecho más pequeño había que ser más solidario con los más desfavorecidos del planeta. Si en el ayer la Metafísica podía ser Dios en un inconmensurable cielo como decían los escolásticos en la Edad Media, ahora este Dios era la misma Humanidad con todos los matices y colores que se quiera.

Beatriz y yo pasamos unos meses inolvidables viviendo una idílica relación que sólo puede interesar a los dos amantes, porque un romance visto con objetividad puede hacer dormir a las ovejas, hasta que como he dicho anteriormente ella tuvo que ir a Paris.

Y vista su extraña actitud hacia mi en estos insantes, no sé si ella ha sido un sueño o no la conozco realmente como es. Por eso me aferro a la esperanza de que pronto la pueda recuperar.

¿Cree el lector que tendré suerte?

Mas cuando yo estoy a punto de embarcar en el avión, recibo un inesperado mensaje en mi móvil que dice:

                             "LO NUESTRO HA SIDO MUY BONITO. PERO ME HE CASADO"

                                                     FRANCESC MIRALLES PÉREZ