MANIFIESTO

                            MANIFIESTO

Navegamos con las blancas velas desplegadas. Celebramos y fortalecemos los lazos que nos unen. La lealtad es la base de nuestra conexión. No nos acobardamos.
Retratamos nuestra humanidad completa, sin rubores, manifiesta, apartando los puritanos velos del luto viejo, de los crucifijos y de los ahítos cardenales mustios.
Acordamos ser sinceros y abiertos en nuestra comunicación. La confianza se construye sobre la verdad, y se fortalece a través de la transparencia.
Llamamos al agua agua, a la intensidad de la piel enrojecida, amor; al estremecimiento, al espasmo, al discurrir fluido del placer, al juntar la intensidad de las miradas con una doble penetración sustentada en los jadeos liberados del Prometeo, que gime y se vierte libremente, lo llamamos abiertamente sexo.
Valoramos siempre mucho nuestras diferencias, comprometiéndonos a aceptar y honrar nuestras singularidades, sabiendo que cada uno aportamos una perspectiva única, y eso enriquece nuestra relación, comprendemos las emociones y experiencias del otro, dejando que nuestras palabras y acciones reflejen nuestro cuidado.
Nos fundimos y fundimos la palabra que se desnuda y viaja en el género de las fantasías y de los sueños......., y sobre todo disfrutamos juntos, encontrando la alegría en lo cotidiano, siendo conscientes de que estamos creando recuerdos, que nos acompañaran siempre a lo largo de nuestra vida.
Somos la risa y la diversión, esenciales en la vida, la buena melancolía, la mano que ayuda a alcanzar metas y a enfrentar miedos. La fuente de motivación y aliento, celebrando triunfos y apoyando fracasos.
Dejamos que brote la cascada, que nos salpique el húmedo cántico del alegre fluir manantial de los sentidos, el furor ardiente de nuestros cuerpos. En el pebetero arden nuestros sueños especiados de mil aromas, nuestras brillantes flores, las llamas, los flamígeros abrazos matinales, la recompensa de nuestros sueños, el alborozo compartido, respetando siempre la privacidad del otro, sabiendo que lo que compartimos en confianza, permanecerá siempre en un refugio seguro, lleno de nuestras historias y sentimientos.
Con todo esto creceremos juntos, inspirándonos a ser la mejor versión de nosotros mismos. Nos alentaremos a perseguir nuestros sueños y a aprender de nuestras experiencias, celebrando los momentos juntos y siempre expresando gratitud por habernos conocido y por tenernos en la vida del otro.