Un año sin ti

Hoy se cumple un año desde que no estás conmigo, ha sido un año extraño, lleno de cambios, aunque ya me he ido acostumbrando a que no estás, sigo buscándote sin darme cuenta, se que ellos también te extrañan, extraño sentir tus pasos al llamarte, tus besos al llegar, tus pelos en mis ropas, tus ladridos, abrazarte cuando me sentía sola y me llegabas a consolar, poco a poco me acostumbro a que no esté tu peso en mi cama, cuando me protegías de las personas al pasear, siempre protectora y fiel a mi lado, mis suspiros son tuyos, ya no estás para mis victorias ni mis derrotas que se sienten más duras en tu ausencia, pero ya puedo hablar de ti con la gente sin que mi voz se corte, aunque mis ojos se humedecen aún, y el pecho se siente presionado, veo tus fotos y recuerdo todos los años compartidos, me enseñaste amar de una manera incondicional y sin tiempos, aún año de tu partida me gustaría contarte tantas cosas, cada mes pongo una vela en tu aniversario, y mis ojos se van nublando con cada letra que escribo, siempre estaré tranquila que tome la mejor decisión, que lo hice por ti, no te merecías el sufrimiento que estabas pasando, siempre seré tuya, y se que con el tiempo mis heridas sanaran, y la vida pondrá a otro en tu lugar, tal como llegaste tú sin esperarlo pero cuando lo necesitaba, pero tú siempre estarás presente cada que los veo a ellos, fuiste una buena madre sustituta, y aún te extraño, la nostalgia a veces me acompaña en las noches en vela, no dejo que nadie se de cuenta que aún sufro por ti, pocos me dieron su apoyo, y agradecida estoy, pero nadie quiere escuchar o ver a alguien que aún está en duelo, más si es por una mascota, las personas no entienden el dolor de perder aúna compañera de vida, solo toleran a las personas que pierden personas, pero la vida de ellos sigue, y obvio la mía igual, solo que con un vacío, que se llena con tus recuerdos y el amor que me diste, al principio solo bloquee el dolor, luego comencé a trabajar con él, y hoy como dos viejos amigos avanzamos por la vida con tu recuerdo, pero no del dolor, sino que de todos los años buenos que pasamos, no quiero recordarte como las últimas semanas que pasaste sufriendo, si no por esa viejita que nunca dejo ser una cachorra en su corazón, te ame, te amo y te amaré, porque fuiste la mejor compañía, me viste crecer, y se que te fuiste cuando debías, tu ciclo conmigo había terminado, y ahora me tocaba aprender del dolor, y crecer, aún año de tu partida al otro lado del arcoíris, mis ojos lloran en tu memoria, y mi corazón duele por no poder abrazarte, pero se que no estas sola, se que estás con aquellos que se fueron antes que tú, y eso me consuela un poco, saber que no estas sola, ahora solo intento ser feliz, y buscar mi tranquilidad, se que será un camino difícil el que se viene por delante, pero sé que estaré bien, y que tus recuerdos siempre estarán presentes con amor, y que ellos a su manera me dan el amor que me tienen, pero quedamos solos sin ti, a veces siento que perdí el rumbo el día que cerraste los ojos por última vez, luego miro al frente y los veo a ellos, y me vuelvo a poner de pie, han sido mi mayor motivación y mi fuerza, desde el día que te perdí, han sido mi faro en la oscuridad, un año sin ti, es increíble cómo pasó el tiempo, y aún duele como el primer instante que tu corazón dejo de latir, mi pequeña, mi viejita hermosa, mi negra azabache, mi doña, te extraño tanto como la primera noche que tuve que pasar sin ti, la herida ya no sangra pero duele, mi viejita, se que descansas, y espero que ahora también seas feliz al otro lado del arcoíris