Código virgo parte veinticinco " fundación walkirias primera parte"
Por Teulfelsaugen
Enviado el 01/03/2025, clasificado en Intriga / suspense
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Concepción domingo 13 de abril de 1997
Después de la velada Miguel Ángel tomó una lata de cerveza y se fue al automóvil cerrando la puerta colocó un CD de Queen y selecciono una pista empezó a sonar " love of my life" encendió un cigarrillo cerrando los ojos dejo que Fernanda se posicionará en su mente.
Concepción, martes 15 de abril de 1997.
En una casona de un barrio exclusivo color mostaza con el techo café, en la recepción Francisco esperaba sentado en un sillón algo incómodo, de vez en cuando miraba el reloj mural (son las ocho con cincuenta y cuatro, un minuto más de la última vez que lo vi) pensaba, así que tratando de distraer y calmar su nerviosismo empezó a observar su alrededor, la secretaria que estaba al frente que hacía el papel de recepcionista una mujer delgada de más de treinta años, cabello negro en una melena muy corta, ojos negros tras unos lentes de cristales grande y marco color rojo, leía una revista mientras tomaba café, a su derecha tres hombres de diferentes edades vestidos de camisa sin corbata, tomaban café parados alrededor de una mesa redonda tras de ellos en una oficina unos veinteañeros instalaban un video reproductor, en un pasillo al lado del salón se aparece una mujer morena de cabellos castaño ondulados de un rostro muy hermoso, al ver a Francisco le sonríe y el responde con otra sonrisa, al otro lado de la recepción había una cocina donde un grupo de cuatro hombres tomaban café y se reían mientras conversaban, de pronto el sonido de la reja de entrada llamó la atención de todos, los hombres empiezan a caminar con los café en la mano ¡ya llegó! Decían a cada rato y todos corrieron hacia el interior de la casona y los hombres de la cocina más los otros que tomaban café en la mesa se encerraron en la oficina donde se montaban los equipos, la recepcionista guardo la revista y mirándolo le dice – ya lo van a atender- de pronto de la puerta de la cocina que conducía al jardín dos hombres cuarentones caminaba hablando desesperados, entre medio de ellos estaba Fernanda al mirar a Francisco se acerca a él y éste se levanta.
- Francisco un gusto verte de nuevo-
- El gusto es mio- de pronto la recepcionista interrumpe
- Señorita Gundersen esta todo arreglado para su reunión con el consejal, el le llamará al medio día y llegaron las facturas lo enviare a los contadores-
- Gracias señorita Morales- luego mirando a Francisco le dice – vamos- tanto Fernanda como Francisco caminaban rodeados por los cuarentones
- Señor Martinez dígame ¿cuando encuentra cucarachas en su casa deja que pasen los días antes de hacer algo?
- No señorita Gundersen los liquidaria al momento-
- Bueno entonces ¿ por qué espero que pasara una semana antes de dar una solución sobre AVEMI?
- Lo siento señorita Gundersen no pasará mas-
- Eso espero, ahora vean que los informes estén listos para la junta de las once-
- Como ordene señorita Gundersen- dicho esto los hombres se marcharon. Al llegar a la oficina de Fernanda Francisco se adelanta y le abre la puerta, ella le responde el gesto con una sonrisa, al ingresar Francisco ve lo majestuosa pero minimalista que era el despacho de Fernanda, en el centro había una mesa de living de madera con un cristal en forma de octágono cerca de la ventana un sofá de tres cojines color mostaza cerca de la muralla estaba el escritorio de madera color café obscuro, encima de esta estaba el computador, un organizador y la famosa agenda azul marino que Miguel Ángel le relató, en el muro había un retrato de la Diosa Freyja, un retrato de ella con sus padres y al otro costado un cuadro con las famosas valkirias, cerca de la ventana había un gomero y al otro costado de la ventana una ficus lyrata.
- Adelante siéntate le dice Fernanda, Francisco miraba a Fernanda, su pantalón color verde oliva ajustado a su cadera que terminaba en pata de elefante, una blusa celeste encima de este un chaleco muy largo color rosado tejido a crochet que le llegaba hasta las rodillas, al sentarse los dos comenzaron a conversar.
- Bien Francisco, ahora me alegra que hayas decidido trabajar en mi fundación, bueno tu labor será de mi asistente personal orientado a las finanzas-
- Si bueno yo tengo una vasta experiencia en el tema-
- Si, bueno eso fue lo que me dijiste el sábado en la noche-
- Si fue verdad, no lo hice para impresionarte –
- Bueno la impresión viene después de lo resultados de tu desempeño – dijo Fernanda mirando con mirada fija y severa a Francisco pero este que se sabía de memoria este truco la miro fijamente por unos segundos y luego bajo la mirada para seguir el juego a la economista.
- Créeme que quedarás impresionada- dijo Francisco sin levantar la mirada
- Espero que sea mucho mejor que tu desempeño en mi cama- Francisco la mira sin mostrar expresión
- Bueno, en realidad tenía miedo de hacerte daño por eso fui más suave- Fernanda lo quedo mirando fijamente pero una explosiva sonrisa le rompió su juego de miradas.
- Jajaja ¡eres genial! Realmente me alegraste el día Jajaja- dice la rubia , Francisco la mira con una leve sonrisa y sosteniendo la mirada, Fernanda al ver que su juego se desmoronó retomo a su seriedad.
- Bueno – dijo la economista haciendo una llamada a su secretaria
- Marian llama a Ricardo Morales que venga a mi despacho y averigua por qué Marcelo Jara no ha llegado aún a mi despacho-
- Enseguida señorita Gundersen-
En ese momento aparece un joven de veintitrés años, delgado de un metro y setenta y cinco de estatura, cabello castaño cortado como melena, ojos negros el izquierdo un poco desviado hacia la nariz, vestido con pantalón negro y camisa color mostaza-
- Disculpe, disculpe señorita Gundersen es que me costó encontrar el café en grano-
- Si parece que se lo pediste a Juan Valdez en persona- Marcelo miraba con recelos a Francisco.
- Espero que prepare una segunda taza para mi nuevo asistente- a pesar de mostrar un estado mental algo especial, Marcelo era un experto en la preparación de café al grado que en un minuto tenía listo las dos tazas, dejando todo limpio y pulcro.
- Ok muchas gracias el resto del café se lo puede beber e igual que los pastelillos que no me comí ayer en la tarde también son suyos- dice Fernanda
- Oh gracias jefa- dicho esto Marcelo abandono el despacho.
- Bien Francisco tu labor será como mi asistente financiero, en otras funciones tendrás que hacer control de todas los departamentos que dependen del área financiera, o sea, administración ,,auditoria y también me acompañaras y deberás verificar todos los aspectos de las negociaciones que lleve a cabo- dice Fernanda
- Bien y ¿ que haré para empezar? En eso se abre la puerta y entra un hombre de un metro y ochenta de estatura de tez blanca cabello negro y traje color pimienta
- Don Antonio Figueroa, buenos días-
- Buenos días señorita Gundersen ¿desea algo de mi?
- Si le presento a Francisco el será mi nuevo asistente financiero quiero que lo capacite sobre todo lo que concierne a la empresa-
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