SUEÑOS Y PESADILLAS 1
Por franciscomiralles
Enviado el 26/03/2025, clasificado en Varios / otros
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Félix Roura era un hombre de cincuenta años; alto y delgado; de cabello entrecano que en aquel momento se hallaba almorzando en compañía de su elegante y bella esposa llamada Patricia que era una mujer rubia de cabello corto y ojos azules, la cual a la hora de los postres le comunicó a éste;
- Los Rovira nos han invitado a cenar este sábado por la noche en su casa. ¿Te apetece ir?
- Ah... Bueno. Regular. Ya sabes que esta pareja cuando se pone a hablar de sus cosas es muy pesada- respondió su cónyuge con un énfasis de cierto fastidio.
De repente Félix miró con fijeza a su mujer y le acometió un singular deseo erótico que en ocasiones se le manifestaba de un modo obsesivo
"Hace ya algunas noches que no puedo copular con ella. La verdad es que sólo me excito si una mujer me hace lo que a mi me gusta. Sí. Se trata ni más ni menos de que me azote con un cinturón. En efecto. Desde cuando era un adolescente e iba al instituto y un día mis compañeros de Estudio me ataron a un árbol que había en el patio a la hora del recreo, y me azotaron con una correa debido a mi peculiar sensibilidad, aquello propició a que yo eyaculara como un burro, por lo que aquella experiencia quedara grabada en mi mente como una fijación y siempre ha sido así - pensaba aquel hombre con una angustiosa desazón-. Por tanto ¿le digo esto a Patricia o no se lo digo? Si le pido este favor, que me pegue con un cinturón para poder hacer el amor con ella, con lo recatada que es pondrá el grito en el cielo. Me tratará de loco, de pervertido y tal vez me abandone. Es por eso que para poder satisfacer mi fantasía erótica acudo con frecuencia a una "profesonal". pagándole lo que sea
- ¡Ay Félix! Que raro estás hoy- le recriminó Patricia.
- ¿Raro? No sé a qué te refieres. Creo que estoy como siempre - respondió él tratando de disimular su alterado estado de animo.
- Sí. Me miras de una manera extraña - insistió ella.
- ¡Bah! Figuraciones tuyas.
A tenor de este oculto sentimiento de culpa, ya que Félix al igual que su mujer había sido educado en un contexto familiar de una ortodoxa moral religiosa, aquella noche el sujeto tuvo una terrible pesadilla.
"Félix está en su casa y se le ocurre ir a mirarse en el espejo del lavabo. Mas al parecer su rostro sin dejar de ser el suyo es asimismo el de un ser diabólico. Es como si en él se hubiese posesionado un diablo, dado que muestra una pavorosa expresión."
Y es que Félix ignoraba que desde un punto de vista psicológico en aquel sueño había aparecido la SOMBRA que es la figura arquetípica de su subconsciente que contiene los aspectos más inconfesables del mismo y que él trataba de reprimir con su mujer, la cual de hecho no es tan temible como se piensa, porque su misión es únicamente la de reclamar al soñante el derecho de expansionarse con plenitud. Existen muchas otras formas de manifestarse la SOMBRA en algunas personas, como por ejemplo sucede en el excelente cuento de Julio Cortázar LA CASA TOMADA en la que "alguien" misterioso que no se deja ver se adentra en la casa del protagonista.
En cambio Oscar, el primogénito de Félix, era otro mundo. Este se había quedado en el paro debido a un deficiente contexto laboral y no le veía salida a aquella nefasta situación. Tanto era así que decidió buscarse un trabajo en el extranjero. Envió su curricúlm a una empresa de productos químicos en Alemania, y mientras esperaba una respuesta que tardaba una eternidad en llega; pues ya había perdido toda esperanza, una noche tuvo un sueño bastante revelador.
" Oscar en su vida onírica está en una estación de tren; compra un billete de primera y lleva un ligero equipaje. Sube a un vagón, y el vehículo se pone en marcha. Durante el trayecto establece amistad con otros pasajeros, que por supuesto son arquetípos de su subconsciente,.hasta que al fin llega a su destino, que es una ciudad desconocida que sólo está en su mente".
Entonces Oscar se despertó en su cama y se apercibió con disgusto que aquel viaje no había sido más que un sueño en el que subyacía el fuerte deseo de cambiar de vida. Pero también los elementos del sueño que adquieren un sentido simbólico con un mensaje más o menos explicito le anunciaba en realidad un cambio que estaba en ciernes en su existencia. Y esto fue lo que sucedió. Oscar fue admitido en aquella empresa de Alemania.
Por otra parte, Félix que era un hombre bastante mateialista, tenía un hermano menor que él llamado Enrique que era su antitésis; era lo contrario del masoquista, puesto que Enrique era un idealista; tenía una predisposición solidaria con la sociedad fuera de lo común, y no se identificaba con las mezquinas y egoístas maneras de ser de quienes le rodeaban; y debido a ello se le consideraba el tonto de la familia. Por esta razón él solía pensar: "¿Qué hago yo en este mundo?".
Hasta que una noche Enrique tuvo un sueño especial.
"Enrique se adentra en un frondoso bosque, y de repente le sale al paso una serpiente la cual dibuja un círculo en torno a él que estaba quieto como un árbol"..
Dicen los expertos que esto fue un sueño mandálico, que es una palabra del complejo idioma sánscrito de cuyo símbolismo emana un inusitado YO espiritual, que a su vez forma parte de un inconsciente colectivo. Pues los sueños de esta naturaleza siempre se expresan mediante círculos o cuadrados o ambas cosas juntas.
CONTINÚA
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