¿Y MI TIO ABEL?

Bajé del autobús y conocí así San Miguel del Portal...

La tierra de mi abuela Magos... de ella heredé el nombre y los ojos verdes. Me esperaban la tía Balbina y la prima Carlota. Sonreían y yo también. Pero no ví por ningún lado al marido de mi tía...

Tío Abel había huido con una de las siete hijas de la comadre de mi tía... la chava tal fue: Fany...una morena de ojos verdes. Eso me contaba la prima Carlota de su padrastro y la tía mía callaba y manejaba el viejo chevy. Yo que principalmente había ido de vacaciones al pueblillo ese por la verga del marido de mi tía. Que me había dado un revolcón sabroso e inolvidable tiempo atrás... Cuando él y mi tía nos visitaron de pasada, una noche de marzo muy lluviosa; y se me apareció en mi cuarto y yo lo esperaba... sabiendo que acudiría a mi... lo había visto seguir mis pasos con los ojos negros, y se relamió mi culo cuando yo adrede me reclinaba a juntar un carro que mi hermanito dejó tirado en la sala, donde el veía tele con mi padre y charlaban del trabajo... Llegó a mi y me tomó en sus brazos... Dijo que me deseaba, y besaba mis labios tan ansiosos de él...los mordía y me acariciaba la vagina bajo de mi blusoncito de gasa rosa, yo no traia calzoncito ni bra y así sólo recorrió los tirantes de mi blusón y este cayó al piso... y allí amaneció... y yo entre los brazos del gupetón tío Abel, y él me cabalgaba incansable... 7 buenos palitos me aventaba en esa noche de pasión ilímite... y ahora que no estaba debíame buscar y hallar otra verga para disfrutar mis vacaciones...