Denunciar relato
Tú eres la noche corta que se vuelve larga cuando susurras mi nombre. Eres como el café, negro y puya si no le echas azúcar. Tu voz, una melodía hermosa como el chocar de las olas en la costa. Yo intenté resolver el problema, pero esos ojos intensos, hondos, intrigantes; tu pelo lacio que le da la perfecta forma a tus mejillas, me hacían olvidar la razón por la que me alejé de ti. Tu risa quisquillosa que me hacía sentir un ardor en lo más profundo de mi cuerpo, me clamaban tuya. El jugo más dulce me supo amargo, la sal en la sopa parecía no estar allí. ¿Qué me hiciste? Ya no puedo volver, mi vida. Ya estoy muy abajo, seis pies bajo tierra.
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