Noche de Policias

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Me llamo Liz y soy de Bucaramanga, este es mi primer relato, espero hacerlo bien.

 

Hace unos meses salí a tomar en la noche, era un jueves y mi mama me acompañaba. Mi esposo estaba en casa descansando así que tome un poco demás y eso siempre me trae problemas. Ya era la media noche, nos fuimos del bar y por desgracia había un reten de la policía y nos hicieron detener. Me me hicieron bajar de la camioneta y al hacerme la prueba de alcoholemia salí con grado 3 y me iban a quitar el vehículo.

 

Por casi dos horas mi mama y yo les rogamos que nos dejaran ir y les ofrecíamos dinero a los policías pero nada, incluso llego un amigo a auxiliarnos, pero sus esfuerzos fueron en vano. Andy era ese tipo de amigo al que llamaba siempre cuando estaba ebria y quería buen sexo,( un pelo como decimos en Bucaramanga)  pero él estaba un poco enamorado de mi.

 

Ya estaba resignada a perder la camioneta, y era algo terrible ya que con ella trabajaba todos los días repartiendo diferentes productos por Santander, cuando de pronto uno de los policías se me acerco y me dijo: “ no llores más cariño, mira que eres muy hermosa para derramar lagrimas”. Yo le sonríe y le dije: “¿No hay nada que pueda hacer para que no se lleven mi camioneta?, hago lo que sea”.

El me miro con morbo las tetas, luego la cola y sonriendo me respondió: “Hay una cosa, pero no sé si estés dispuesta, si dices que si, ve al supermercado que está en frente, compra un yogurt y me lo traes”.

Yo me tranquilicé, compre el yogurt y me senté dentro la camioneta de la policía, al escuchar el que cerraron la puerta me asuste. El oficial se me acerco y sin mediar palabra abrió mi blusa, subió mi brasier y comenzó a lamer mis tetas de forma muy fuerte. No pude evitar excitarme y mande mi mano sobre su pantalón, abrí su cremallera y le saque esa enorme verga para masturbarla.

Siempre que estoy ebria me caliento mucho y me acuerdo de todo el porno que a veces veo en las mañanas, así que al ver semejante verga enfrente mío un corrientazo paso por mi vagina.

El me tomo del cabello y me dijo: “Bueno zunga, a mamar!”, yo le respondí: “Le chupo la verga un ratico pero no voy a hacer nada más”.

Como igual no quería demorarme tanto empecé a lamer esa verga con muchas ganas, siempre intentando tragármela toda, chupaba sus bolas y escupía su enrojecida cabeza. Después 10 minutos de mamada intensa mi chocha empezó a mojarse y su pene parecía que iba a explotar asi que le dije: “no se vaya a venir en mi boca”, el solo me dijo: “Esto apenas comienza, zorrita” y empujo mi cabeza con fuera hacia su miembro.

 

Andy se preocupo al ver que yo demoraba dentro de la camioneta y me envío varios mensajes por whatsapp, yo intente varias veces contestarle, pero el policía siempre me interrumpía, metiéndome cada vez más su verga. Me percate que él no se iba a venir fácilmente así que puse mis tetas en medio de su miembro y le hice  una “paja rusa” también me baje el pantalón y comencé a masturbarme haciéndole excitar cada vez más, de repente sentí una mano agarrando mis nalgas y una lengua saboreando mi mojada chocha, un segundo policía ya estaba detrás mío. Yo me asuste y les dije: “que me van a hacer?”  Ellos solo sonrieron y empezaron a culearme de una forma bestial. El segundo policía me penetraba con mucha fuerza sin para ni un instante, intente no sentir nada, pero ya era tarde y luego de unos minutos sentí mi primer orgasmo.  Los policías destaparon el yogurt y me untaron el culo con él, yo les dije” quieren darme por el culo, y  usan yogurt como lubricante?, tienen guevo!” ellos me cachetearon y me metieron nuevamente sus vergas sin compasión. Mi boca ya me dolía de tanto mamar y mi culo recibía con gran placer esa enorme verga. Finalmente nos vinimos los 3  y llenaron mi culo y boca de espeso semen.

Luego con desprecio me lanzaron una toalla para limpiarme, me vestí y salí del vehículo policial sonriendo diciéndole a mi mama y Andy que todo estaba solucionado.

 

Al llegar a mi casa mi esposo sonreía y me preguntaba porque olía tanto a yogurt.


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