Solo la locura cura el amor.

No tengo la seguridad de volver a ser tu amigo del ayer.

No tengo la esperanza de que vengas a mis brazos como alguna vez lo hiciste.

No tengo tampoco tu credibilidad de nada y mucho menos tu implacable fé.

No tengo nada puedes ver. Pero todavía estoy delante de tí juntando todos los pedazos de un tenue y distante "te quiero". Quiza para cuando termine tu ya no estes ahí.

No me importa porque guardaré los trozos de ese "te quiero" junto a eso que alguna vez fue mi corazón, allí en la pradera de oscuridad donde los recuerdos mueren degollados y los sentimientos se retuercen hasta morir deseando no haber nacido..

Allí los mantendré seguros de si mismos y de mi por un largo y penoso tiempo.

Y cuando eso pase me habré olvidado de ti. Porque es fácil, puedo y también me gustaría!.. ¿Pero sabés qué?

Todavía estoy atado a ti por alguno de los sentimientos que aún hoy se resisten a mirir, porque prefieren una larga cadena de sufrimientos averrantes; y no me importa porque nada es para siempre, en algún momento se morirán y cuando eso suceda yo voy a ser el primero en festejarlo. El primero en sonreír. El primero en ser feliz y el segundo el llorar. Porque la primera seras tu querida mía.

Dirás, "eres un maldíto maníaco" o lo que sea, tendrás razón..

Solo recuerda esto por siempre: No hay mejor cura que la locura y la locura no tiene cura.