Los Cambios

Texto

Como ir en un barco, que de pronto vira a babor o estribor de forma súbita, pero no se mantiene quieto, zozobra y se mete en las nubes y no ves, no ves nada, solo bruma.

Un cosquilleo te recorre el estómago y tienes esa sensación de vértigo, de caída al vacío, que te regala la inestabilidad.

Pierdo mi rutina, mis zapatillas de andar por casa. Ahora voy descalza y me siento más libre, pero hay piedras que me dañan las plantas de los pies, caminar ahora es más duro.

Mi realidad cambio, en un abrir y cerrar de ojos, ocurre así y ese día tu vida pega un giro para siempre. Jamás vuelve a ser igual.

La mente ayuda a aterrizar, a pasar el duelo dejándote en ese estado de semi levitación. Y te sientes confundido, desorientado, inseguro, solo, porque nadie, aunque este a tu lado, puede ocupar ni compartir tu sitio. Pueden acompañarte, algunos hasta comprenderte, pero no te pueden sustituir.

 Aquí estamos solos, como cuando nacemos y cuando morimos. Los cambios son las estaciones intermedias entre ambos hitos. En ellas la sensación de soledad es manifiesta.

Es la cruda realidad que curte. ¡¡ Qué fuerte eres¡¡ me dicen ¿Fuerte? Y una mierda, es lo que me tocó vivir, aquí no hay merito, querido amigo.

Aquí hay paciencia y dejar que el tiempo decolore tus sentimientos, tus apegos, hasta que parezcan sueños de otra vida, vida caída en el olvido para sanar y poder vivirla de nuevo.

Y empezar a disfrutar, a reír, a soñar …

A reencontrarme con mi mejor compañera, la que me entiende y la que vive conmigo estas situaciones, la que está junto a mi. Nos pegamos, nos hacemos un “uno” y aterrizamos en la nueva vida. Es mi “yo” cosido de nuevo a mi cuerpo que me renueva hasta el siguiente cambio….

Porque como dice la sabiduría cubana, “La vida es para vivirla mi amol , porque no hay otra”.