PRIMAVERA BABILÓNICA.

Cual los jardines de Babilonia, 

se siembren flores por las terrazas.

Espero llegue la primavera,

traiga su sol y su tibia sabia,

vengan sus rosas y mariposas

con sus claveles de sangre y plata.

Veré sus flores inmaculadas, 

nos den su aroma, sus mil colores 

rompan el aire con sus botones, 

que al reventarse mi vista encanta.

Rasguen la tierra con furia insana, 

miles de plantas buscando el cielo,

como si fueran canoras aves, 

rompiendo trinos, batiendo alas.

Colmen de nidos por las rendijas 

de sus altillos las viejas casas

cuelguen glicinas por los pretiles. 

las madreselvas su aroma esparza.

Cual los jardines de Babilonia, 

se siembren flores por las terrazas

abovedadas con sus alzadas, 

por acueductos caigan sus aguas.

Beban las flores, todas las plantas, 

por los balcones caigan sus ramas

cante la vida por las montañas 

por los esteros por las cañadas.

El sol radiante de primavera, 

mezclado al viento de sus mañanas,

corra praderas, ondee trigales, 

surcando arroyos, rizando aguas. 

Risas de niños llenen las plazas, 

con vivos gritos y tez rosada

vivando el sol de la primavera, 

adiós inviernos, adiós heladas.

Cual los jardines de Babilonia,

se siembren flores por las terrazas.

            Nicolas Ferreira Lamaita.