Me muero de la impaciencia por encontrarme contigo. A medida que se va acercando el momento, mi corazón y mi sexo laten casi al compás de pura excitación.
Hemos quedado en una terraza... todavía hace buen tiempo ... camino hacia la mesa donde te encuentras y veo al amigo... tu sonrisa, dos besos y soy consciente de tu olor entonces, de la fuerza de tus brazos y la expresividad de tus ojos.
Charlamos y reímos, nos contamos y mientras estamos en ello me dices ... ve al baño y quítate el tanga, te quiero libre para mí.
Si más, me levanto y voy al baño de la cafetería, bajo las escaleras y poco después de entrar oigo la puerta .- Abre me dices... abro , me giras de espaldas, me inclinas y metes tu polla duramente ... dos, tres, cuatro embestidas... ufffffff me mareo de tanto placer... de repente te separas , sales del baño y me dejas allí... jadeando, empapada, con el coño tan húmedo que me moja las piernas... abierto pidiendo más.
Intento recomponerme y salgo oliendo a sexo, destilando deseo por cada poro de mi piel.
Comentarios
COMENTAR
¿Te ha gustado?. Compártelo en las redes sociales