Denunciar relato
Despliego mi alambrada por tierras ajenas,
Alli donde nadie da nada y ya nada me estorbe
Alargo los brazos sin gracia ni pena
Para atrapar el espacio y el llanto en el borde
Los días agoto como agoto una vida
Y en el espejo buscó lo que yo sólo no encuentro
Limpio, de mis heridas, las que no fueron queridas
Mis raídas ropas procuro al aire y al viento
Las risas son palomas en viaje nocturno
La voluntad, la maleta que nunca utilizo
Rasgando la carne en el sitio oportuno
Bebo de un agua que nunca amortizo
Y mi alambrada desplegaré por tu pena
Mis brazos atraparan tu trémula esquiva
Limpiaré los recuerdos con tu suave piel morena
Mi equipaje dejé al doblar la última esquina
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