Videojuegos, Risas y Amistad: Combinacion Perfecta Para El Amor

Era la séptima vez que la señora Verónica iba a tocar la puerta de una pequeña casa. El barrio era silencioso, y debía permanecer así, pensaba la señora Verónica. Después de insistir un rato, alguien ario la puerta y luego que la señora verónica de su sermón sobre el silencio, se retiró sin despedirse.

A Andrés eso no le interesaba. Dentro de su casa él podía hacer lo que quería. Y lo que más quería, en ese momento, es terminar su partido de futbol con quería, y posiblemente la mejor de sus amigas, Paula.  Ella había ido a la cocina a por dos vasos de jugo de naranja. Andrés tomo su mando, y cuando Paula estuvo lista, puso “Play” a la consola de videojuegos.

Entre gritos, risas y empujones, paso lo que Andrés menos quería.

-          ¡Gooooooooool! – grito Paula, poniéndose de pie.

Andrés frustrado trato de ocultar su fastidio de haber perdido. Paula seguía celebrando, y comenzó a hacer su baile de triunfo. Tarareo una movida melodía, y bailaba al ritmo de ella. Eso hizo que Andrés se olvide de todo, eso lo alegraba. O más bien, ella lo alegraba.

Han sido amigos desde que tenían 5 años. Y desde entonces han sido inseparables. Ella lo quería mucho, y lo apreciaba aún más, él era su mejor amigo. Ella ya se lo había dicho varias veces. Pero Andrés sentía algo más por ella, lo que el sentía… era amor.

Paula seguía bailando. André aun seguí sentado en el sofá. Él tiro de ella para que se sentara, pero Paula tropezó. Ella cayó encima de Andrés. Sus rostros se encontraron frente a frente, sus ojos estaban tan cerca, ambos sentían la respiración del otro. Andrés le saco la lengua, ella algo molesta hizo lo mismo. Ambos rieron, Andrés cerro los ojos un momento, y entonces sintió los labios de Paula acercarse a los suyos. Ella deposito un beso en los labios de Andrés, no sabía porque lo hizo. Tal vez ella también sentía algo más por él.

Ese beso duro un instante, pero la emoción, la alegría, la felicidad y el amor duro de por vida.

Ahora sus hijos escuchaban muy atentos y sorprendidos la historia de cómo sus padres se hicieron novios, al pasar el tiempo se casaron y con el fruto de su amor tuvieron a sus niños queridos.